Helena y Blanca se quisieron toda la vida, a pesar de que eran casi opuestas en su manera de pensar y de actuar. Helena buscaba la aventura y el cambio y pretendía dejar una huella de su paso por el mundo. Blanca sólo anhelaba la tranquilidad en compañía de los seres queridos. Juntas descubrieron la amistad, el sexo, el amor y también el dolor, las injusticias y la muerte.