Viriato auténtico genio militar, político y diplomático elegido por los lusitanos para asumir el mando supremo de millares de guerreros, derrotó a los sucesivos ejércitos enviados por Roma con el propósito de apoderarse de la península Ibérica, hasta que finalmente murió asesinado. Viriato ha pasado a la historia sobre todo como el defensor de un mundo que corría el riesgo de morir asfixiado por el poderío romano.