El padre de Kully, un escritor libre, ha huido del régimen totalitario alemán. Kully su madre viven en una errante sucesión de hoteles por toda Europa. A veces logran reunirse los tres, pero esto nunca dura mucho tiempo. Kully viaja con un par de libros y no recibe más educación que las vagas lecciones de su madre; sin embargo sabe demasiado bien qué son las fronteras, quién puede estar dispuesto a prestarles un poco de dinero y quién no lo hará jamás, para qué sirve un visado, cómo tratar a un editor furioso... Kully conoce el "juego de los países" mejor que la mayor parte de los niños del mundo: un juego en el que ningún libro de historia podrá ganarle nunca.